Por muy deprisa que camines, siempre hay algo que te hace que pares...sucesos que te obligan a preguntarte: ¿Le estás aportando algo al mundo o sólo te aprovechas de él?
Es una creencia popular pensar que el dia a dia el lo único que uno puede llegar a abarcar. Hay tantas decisiones que tomar en un dia cualquiera...¿Qué me pongo? ¿Cuánto me costará llegar? ¿El qué? Problemas nimios que se amontonan con mayor precisión que las piedras de Giza. ¿Has pagado las facturas? ¿Es el cumpleaños de alguien? ¿Dónde has puesto las llaves? ¿Es posible mantener el equilibrio ente los dos mundos...casa y trabajo?
Pero hay más mundos aparte del que gravita a tu alrededor más rápido de lo que tú te crees..."Universos alternativos" donde la gente rebusca en contenedores para decidir qué ponerse o qué comer...Pueblos donde no hay facturas que pagar, porque no hay nada que comprar...aldeas donde los niños no se molestan en celebrar sus cumpleaños...ciudades donde las llaves son tan irrelevantes como las puertas que deberían abrir. Estas cosas nos recuerdan que los superhombres no son seres de otros planetas...sino cualquier individuo capaz de ver más allá de su pequeño mundo, y tender la mano a otros mundos ajenos al limitado ámbito de su existencia.
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